En Ingapicarca, Templo al Sol, está la principal atracción de Cañar. Pero esta provincia, perteneciente al Austro ecuatoriano, también tiene otros sectores interesantes como lagunas y mercados indígenas.
Con piedras perfectamente talladas y unidas con mortero natural, permanece Ingapirca, el complejo arqueológico más importante del Ecuador. De estructura elíptica, este Templo del Sol sirvió para la realización de ceremonias y rituales de la cultura Cañari-Inca. También tuvo fines estratégico-militares. Las ruinas están integradas por un cementerio, observatorios solares, caminos, depósitos, aposentos de sacerdotes y una plaza indígena, entre otros.
La región del Amazonas o de la selva, situada a al este de los Andes, es una de las áreas más accesibles y amistosa para el viajero, el área biológica más rica en la tierra.
Es una de las regiones más visitadas por los turistas extranjeros que llegan al país.
Rodeada de montañas, cruzada por cuatro ríos y con una arquitectura de los siglos XVI y XVII, Cuenca ha sido declarada por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Es la ciudad más grande y el principal puerto de Ecuador.
Se encuentra al norte de la serranía de Ecuador, es conocida como la provincia de los Lagos. Aparte de sus lagos, tiene otros puntos de interés, como los volcanes, cascadas y aguas
Sitio de riquezas precolombinas convertido en el destino arqueológico más importante y visitado del país.
Las Islas Galápagos se encuentran a casi mil kilómetros de distancia del continente y constituyen uno de los paraísos naturales del planeta.
Está situada a aproximadamente una hora y media al norte de Quito, a los pies del volcán Imbabura. Posee un encanto paisajístico, riqueza cultural, historia y desarrollo comercial.
Este parque abarca las cuencas de los ríos Yasuní, Nashino, Cononaco y Tiputini.
La capital de Ecuador se encuentra en un valle rodeado de montañas a 2.850 metros sobre el nivel del mar.
Riobamba es, sin duda, la ciudad de los más bellos y esplendorosos paisajes del Ecuador. Seis nevados diversos la vigilan y protegen.
Muchas playas del Pacífico ecuatoriano se ubican junto a pequeños pueblos y comunidades de pescadores que lanzan sus redes antes del amanecer.